El sueño de Horus

Hola a todos,

En esta ocasión quiero compartirles un raro sueño que me sucedió días atrás.

Normalmente soy una persona a la cual las siestas en la tarde no le animan mucho, por consiguiente, es muy difícil que duerma en estas horas del día, salvo que esté enfermo, es la única manera en la que llegó a conciliar el sueño.

 Pero esa tarde marchaba todo bien, a pesar de la cuarentena me las he ingeniado para hacer varias actividades que me permitan estar activo y no sentirme tan aburrido, como hacer ejercicio, leer varios libros a la vez, aprender un nuevo idioma con los tutoriales de YouTube, escuchar mientras duermes los videos de aprendizaje del idioma, todo es incierto hasta que uno no lo pruebe.

 Cerca de las tres de la tarde, terminada de leer unas cuantas páginas del libro de Inteligencia Emocional de Daniel Goleman comencé a bostezar, así que dejé el libro en el escritorio que queda a mi lado derecho, pasado eso me recuesto en mi cama, me pongo a pensar un poco en la empatía a la cual hacía referencia el autor en su libro, lo trataba como la capacidad de comprendernos a nosotros mismos y sintonizar emocionalmente con los demás no pude discernir más allá de esto ya que me quede dormido.

 No se realmente en qué punto comenzó mi sueño, pero lo puedo describir de esta forma. 
Abrí mis ojos y vi un techo que no era el de mi casa, vi a mi alrededor y estaba en otra casa que no era la mía, en una cama acostado y arropado con una manta de color rojo intenso y un blanco tan claro como la nieve, esta manta era tan gruesa y la cama tan grande como si fuese hecha para que un gigante estuviera en ella, frente a  había una mujer de pie mirándome sin ninguna expresión en su rostro, caminaba de un lado al otro, yo seguía todo con mis ojos, las cuatro paredes de la habitación comenzaron a cambiar de color, se tornó por un momento de un color grisáceo, luego algo parecido al morado hasta llegar a un áspero color negro con una luz que resplandecía en su interior, miró debajo de mi manta y encuentro a un niño no mayor a 5 años acostado junto a mí, lo alcanzo a ver y estaba completamente dormido, yo no entendía nada pero tampoco tenía miedo, tan solo me encontraba intrigado de todo esto, al principio no podía salir de la cama, me sumergí debajo de la gran manta y no encontré ninguna salida posible, luego saque la cabeza para ver nuevamente el exterior y allí estaba esa mujer con grandes ojos y cabellera negra mirándome, el techo sobre nuestras cabezas se estaba dilatando, tome la manta con mucha fuerza y con las dos manos la tiré hacia el lado izquierdo de la cama, cuando hice esto pude salir de la cama puse mis pies en el suelo y como por arte de magia antes de tocar el piso, fui calzado con un par de zapatos oscuros, la mujer no hizo nada para impedir mis rápidos movimientos, tome la primera puerta que se estaba cayendo a pedazos y no vi atrás.

 Cuando abrí la puerta vi algo que en la vida había imaginado, estaba en una habitación o más bien en algún lugar donde parecía que estaba pisando el universo y todo lo que me rodeaba eran estrellas y oscuridad, en frente mío estaba el mítico Dios egipcio Horus, tenía una musculatura impresionante, su ropa parecía hecha de oro, sus expresiones eran tan profundas, emanaba un poder y una rabia contenida difícil de explicar, creo que puedo describirlo como una opresión y una fuerza invisible, su pico de ave era de un color amarillo intenso y yo solo me quede viéndolo, hasta que elevó las manos y dio un grito muy fuerte, que hizo estremecer todo el espacio donde nos encontrábamos, y ese lugar parecido al universo comenzó a destruirse, resquebrajarse desde los techos hasta el suelo dejando solo una estela blanca en todos lados, y un fuerte movimiento parecido a un terremoto sobre mis pies, yo me sentía aturdido, hasta que sentí los ojos de Horus sobre mí, muy intensos y omnipotentes, que me congelaron en el acto y luego desperté.

 Tome mi celular y vi que eran las siete de la noche, había estado soñando durante cuatro horas, parecía imposible que haya pasado tanto tiempo, y sobre todo seguía pensando en todo lo que aconteció, que significa todo esto, el niño en la manta, la mujer observándome sin nada más que atribuir, será ella la mamá de ese niño, y luego la intervención de Horus, una locura completa, y sobre todo puedo decirte que todo el sueño fue muy realista, la sensación del caos general, lo pesado que era la manta, los pies en el universo, el miedo que llegue a sentir cuando veía el universo desmoronarse. 

Tal vez sea solo un sueño o existe un mensaje oculto, solo el tiempo me dará la respuesta.

Saludos,


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